Maximiliano Valdés

El músico chileno Maximiliano Valdés es guitarrista, bajista, percusionista y cantante.

Percibir, conocer y utilizar la diversidad de la música son componentes importantes para irradiar esta sinceridad.

Una melodía sencilla merece la misma atención y trabajo que una pieza virtuosa.

Los aspectos de ritmo, melodía, armonía y sonido son decisivos para ello y se exploran con devoción independientemente del nivel de dificultad de la composición.

Al músico le gusta moverse en diferentes estilos y se inspira tanto en colegas como en artistas importantes para él, como Violeta Parra, John Scofield e Igor Stravinsky.
En Chile, Maximiliano recibió lecciones de guitarra de Jorge Díaz y Pedro Rodríguez. En 2018 se mudó a Alemania para estudiar con músicos como Frank Winkgold, Anne Mette Iversen y Florian Weber.

Gracias al compromiso y desafíos de estos maestros, Maximiliano pudo ampliar sus horizontes musicales y crecer como artista.

En 2022 fundó el Trío Maximiliano Valdés Hammond junto al pianista Leon Richenhagen y el baterista Felix Seefluth.

La combinación de disciplina y esfuerzo nos ha enseñado a respetar la creación musical como una riqueza humana.

El repertorio del concierto fue una combinación de composiciones originales y reinterpretaciones de clásicos del jazz. Cada pieza fue desarrollada con una pasión y creatividad desbordantes.

 

donde actué

La posibilidad de expresar tanto la intensidad ígnea como la vulnerabilidad humana en su música es de gran importancia para Maximiliano a fin de transportar toda la gama emocional del ser humano en sus interpretaciones y composiciones.

La combinación perfecta de talento e improvisación hace de la velada una experiencia inolvidable para los amantes del jazz.

La técnica y la capacidad de crear melodías matizadas y emocionalmente ricas hicieron que esta velada fuera única.

Desde el momento en que el trío entra en el escenario se siente la energía que envuelve a la audiencia.

La interacción entre los músicos ya era solida desde los primeros compases.

Como improvisaron y como ellos mismosse alimentaban unos a otros era un cautivador juego musical.